De los tales es el reino de Dios

Mateo 2:16.......Herodes entonces,  cuando se vio burlado por los magos,  se enojó mucho,  y mandó matar a todos los niños menores de dos años que había en Belén y en todos sus alrededores,  conforme al tiempo que había inquirido de los magos.

Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes,  vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo:  ¿Dónde está el rey de los judíos,  que ha nacido?  Porque su estrella hemos visto en el oriente,  y venimos a adorarle.

Los magos cambiaron su rumbo para no decir a Herodes donde nacería El Salvador, en su maldad a Herodes no le interesó matar a todos los niños menores de dos años pensando que hay caería Jesús 

La causa de esta matanza es el no aceptar el propósito de Dios, el de salvación, y redención para los hombres por medio de Jesús.

Te has preguntado alguna vez que propósito tiene Dios con tu hijo? Será que el Señor traerá salvación a muchos por medio de el?

En el pasado el instrumento utilizado por Satanás ( el cual es real ) fue Herodes, hoy puedes ser tu al impedir que tus hijos pequeños  vengan a Jesús El cual dijo: Dejad a los niños venir a mí,  y no se lo impidáis;  porque de los tales es el reino de los cielos. (Mateo 19:14).

En esta época tan moderna el diablo ya no necesita quitarle la vida a un niño físicamente, con quitarle el amor de sus padres, el calor de un hogar con papi y mami unidos, en paz ya les esta haciendo un daño,  al impedir que vengan al conocimiento de Dios por medio de Jesus, estarías fraguando, cocinando un ser sin temor y respeto hacia Dios.

Instruir a los niños en los caminos de Dios hará que cuando este sea un adulto, no se aparté de El, un verdadero hijo de Dios será de bendición para muchos, no le cortes esa oportunidad a tus hijos pequeños.

Nuestros hijos son la extensión, la prolongación de nuestra vida, proyectate en ellos, se testimonió y ejemplo para ellos, se un espejo donde ellos se reflejen.

ORACIÓN

Padre que estás en los cielos, perdóname por impedir que mis niños vengan a ti al no llevarlos a la Iglesia y al conocimiento de tu palabra, perdóname por no ser el mejor ejemplo para ellos. Declaro que a partir de hoy seré de testimonio para ellos, dejare que se acerquen a Jesús.