viernes, 24 de noviembre de 2017

El enojo de Jonas


Jonas 4:4  Pero Jonás se apesadumbró en extremo, y se enojó. Y oró a Jehová y dijo: Ahora, oh Jehová, ¿no es esto lo que yo decía estando aún en mi tierra? Por eso me apresuré a huir a Tarsis; porque sabía yo que tú eres Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte, y de grande misericordia, y que te arrepientes del mal. Ahora pues, oh Jehová, te ruego que me quites la vida; porque mejor me es la muerte que la vida.

El enojo de Jonás consistía en su deseo que Dios destruyera a Nínive, la nación enemiga que por años les había hecho daño. Las ideas del profeta estaban tan confundidas, pues pidió a Dios que le concediera la muerte, aun cuando Él recién le había devuelto la vida porque el mismo Jonás se lo pidió. 

El enojo no nos deja razonar con cordura, nos llena de tinieblas el pensamiento, nos hace decir locuras.....Gracias al Señor que nos tiene misericordia y no nos concede todo lo que pedimos. Siempre que usted se enoje, aunque no parezca, es contra Dios que usted se enoja.

“Porque sabía yo que tú eres Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte, y de grande misericordia, y que te arrepientes del mal”. Jonás estaba muy enojado porque Dios le concedió el arrepentimiento al pueblo de Nínive, (los Asirios) eran enemigos de Judá e Israel. Jonás quería que Dios trajera juicio sobre estas personas que él odiaba.

Porque mejor me es la muerte que la vida. El arrepentimiento y salvación del pueblo de Nínive era tan doloroso para Jonás que él prefiere morir a tener que pensar en ello; y también declara que esa era la razón por la cual él huyó del llamado. No lo hizo por el temor a no ser efectivo, sino por el temor de que fuera efectiva su predicación.

"Y salió Jonás de la ciudad, y acampó hacia el oriente de la ciudad, y se hizo allí una enramada, y se sentó debajo de ella a la sombra, hasta ver qué acontecería en la ciudad. Y preparó Jehová Dios una calabacera, la cual creció sobre Jonás para que hiciese sombra sobre su cabeza, y le librase de su malestar; y Jonás se alegró grandemente por la calabacera. Pero al venir el alba del día siguiente, Dios preparó un gusano, el cual hirió la calabacera, y se secó".

"Y aconteció que al salir el sol, preparó Dios un recio viento solano, y el sol hirió a Jonás en la cabeza, y se desmayaba, y deseaba la muerte, diciendo: Mejor sería para mí la muerte que la vida.  Entonces dijo Dios a Jonás: ¿Tanto te enojas por la calabacera? Y él respondió: Mucho me enojo, hasta la muerte.

 Y dijo Jehová: Tuviste tú lástima de la calabacera, en la cual no trabajaste, ni tú la hiciste crecer; que en espacio de una noche nació, y en espacio de otra noche pereció.  ¿Y no tendré yo piedad de Nínive, aquella gran ciudad donde hay más de ciento veinte mil personas que no saben discernir entre su mano derecha y su mano izquierda, y muchos animales?...Jonás 4: 5-11

Oración
Ruego, Señor, en el nombre de tu hijo Jesús, guarda mi corazón del enojo. Tú Gobiernas de acuerdo a la medida de tus misericordias. Tú eres Justo, nosotros injustos. Gracias porque me has perdonado todos mis pecados. ¿Cómo me he de enojar cuando tú perdones a mis enemigos?



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