lunes, 28 de septiembre de 2015

Fe para reposar



Levítico 25:1......Jehová habló a Moisés en el monte de Sinaí, diciendo:Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando hayáis entrado en la tierra que yo os doy, la tierra guardará reposo para Jehová.Seis años sembrarás tu tierra, y seis años podarás tu viña y recogerás sus frutos. Pero el séptimo año la tierra tendrá descanso, reposo para Jehová; no sembrarás tu tierra, ni podarás tu viña.

En los diez mandamientos, Dios ordenó que los hombres trabajaran seis días y reposaran el séptimo, Él estableció que el sexto día la producción de su trabajo diera para sostenerse en el séptimo, que era de reposo.

Esto requiere de Fe: ¿se atreverá el panadero a cerrar el negocio todo el día domingo? o ¿el taxista que está pagando la cuota del carro a no laborar un día completo? o el que tiene cualquier negocio ¿pararía un día? ¿Seremos capaces de creer que el sexto día Dios dará lo necesario para no trabajar el séptimo día ?

Luego estableció que cuando Israel entrara en la tierra prometida, seis años cultivara la tierra y viviera de ella, pero que el año séptimo no hiciera nada y dejara reposar la tierra un año. Imagínese: los mas incrédulos se preguntarían “¿de qué viviremos? ¿Cómo se le ocurre a Dios que voy a dejar que los frutos se pudran sin consumirlos y sin poder venderlos?”

Pero cuando llegó el año sexto, los que sí creyeron y fueron obedientes, recogieron para tres años  (o sea recogieron el triple)....Luego Dios fue más allá y sacó un nuevo decreto: "harás esto durante siete ciclos".

"El año cincuenta os será jubileo; no sembraréis, ni segaréis lo que naciere de suyo en la tierra, ni vendimiaréis sus viñedos, porque es jubileo; santo será a vosotros; el producto de la tierra comeréis. En este año de jubileo volveréis cada uno a vuestra posesión" Levítico 21:11.

En el año de Jubileo, las tierras empeñadas y vendidas deberían ser regresadas, sin interés alguno, a sus primeros dueños, y los esclavos deberían ser soltados y declarados libres para siempre.

Observe que todo esto requiere de una práctica de FE, gradual, y en aumento: 

Primero, fe para descansar en el séptimo día, creyendo que el sexto será de bendición. Segundo, Fe para creer que en el año seis, Dios proveerá para que el año siete se dé descanso a la tierra. Tercero, fe para creer  que en el año de jubileo, lo que perdí lo recuperaré todo. Cuarto, fe para creer que seré libre de toda clase de deudas y de la esclavitud del diablo y del pecado.

Hermanos, esto es una preparación en escala que comienza desde el día domingo que soltamos todas nuestras actividades, en Fe, para adorar a Dios, unidos como hermanos, hasta el día  que suene la trompeta en los cielos y dejemos todo lo que está en este mundo para entrar en el descanso eterno en los cielos. 

Oración
Entiendo, mi Señor, que en la Fe hay confianza hacia ti. Hoy decido cumplir con tus mandamientos. Guardaré el día de reposo y me deleitaré adorándote en compañía de mi familia. Creo que tú suplirás todo lo que necesitemos.

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