Marcos 8:14-21....... Habían olvidado de traer pan, y no tenían sino un pan consigo en la barca. Y él les mandó, diciendo: Mirad, guardaos de la levadura de los fariseos, y de la levadura de Herodes. Y discutían entre sí, diciendo: Es porque no trajimos pan.
Las escrituras relatan en Marcos 8:1 que Jesús efectuó el milagro de multiplicar siete panes y unos pocos pececillos en una cantidad suficiente para atender más de cuatro mil personas con hambre y sobraron siete canastas. Este milagro debió ser suficiente para que los doce apóstoles y los fariseos creyeran que nada era imposible para Jesús.
Después de este evento, dice la escritura, "Vinieron entonces los fariseos y comenzaron a discutir con él, pidiéndole señal del cielo, para tentarle. Y gimiendo en su espíritu, dijo: ¿Por qué pide señal esta generación? De cierto os digo que no se dará señal a esta generación. Y dejándolos, volvió a entrar en la barca, y se fue a la otra ribera.
Una cosa es hacer un milagro ante la necesidad del ser humano y otra el dar satisfacción al religioso, incrédulo, a quien todo le parece mal, que todo lo cuestiona, que piensa que su religión es la "verdadera".
Esta incredulidad de los fariseos parece que afectó, que contagió a los discípulos, por lo cual Jesús les dijo: “guardaos de la levadura de los fariseos”.
Aunque Jesús les estaba advirtiendo acerca de peligros espirituales, ellos sólo pensaban en el pan. Parece como si estuvieran hablando lenguajes completamente diferentes. Tan obsesionados estaban los discípulos con lo material, que no eran capaces de entender el mensaje de Jesús.
La levadura de los fariseos es la incredulidad. Guardarse de la levadura de los fariseos es guardar nuestra mente de palabras contrarias a la fe en Cristo, pronunciadas por personas de aparente religiosidad.
Su dificultad principal era no saber quién era Jesús. Si ellos se hubieran dado cuenta de que el mismo Creador y Sustentador del universo estaba con ellos en la barca, no habrían estado preocupados por el pan.
Jesús nos recomienda en Mateo 5:20, …"si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos”. Esta exhortación dada por Jesús debe hacer eco en nuestros corazones para que podamos estar en su presencia.
Oración
Gracias, Señor Jesús, por la fe depositada en nuestros corazones por la cual, aun sin ver, podemos estar seguros que tú tienes el poder de actuar en cualquier situación adversa a nuestro favor. Guardaremos nuestros corazones de toda palabra o escrito que niegue tu poder y tu misericordia.
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