jueves, 7 de abril de 2016

Día 98 El principio de conocer y entender a Dios



Jeremías 9:23........ Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.

Deténgase usted en su andar diario y tómese un tiempo para meditar en este principio y hágase preguntas como está: ¿conozco yo al Dios mencionado en la Biblia? O  ¿tengo sólo una idea de lo aprendido de mis antepasados?

¿Entiendo la misericordia de Él hacia nosotros?  ¿Entiendo y acepto sus juicios sobre nosotros?, ¿Comprendo que Él es Justo? Si su respuesta es sí, aún le falta más.  Jehová  nuestro Dios espera de nosotros que seamos como Él, que tengamos misericordia de nuestro, prójimo. Él dijo: "Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso." (Lucas 6:36)

1 de Juan 3:10 dice: "En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios."

"Porque este es el mensaje que habéis oído desde el principio: Que nos amemos unos a otros. No como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué causa le mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas."

Agrega el verso 16: "En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos. Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?

La exhortación  va en el sentido de no vanagloriarnos con nuestros títulos adquiridos con nuestro esfuerzo humano, con nuestra sabiduría e inteligencia para hacer negocios y fortuna, ni en ser fuertes y valientes si no en conocer quién es Dios y entenderle.

Si Dios no está inmerso en nuestra vida, en nuestras decisiones, en nuestros  anhelos, entonces ¿cómo podemos decir que creemos en Dios?

Es sólo a través de la búsqueda personal que logramos entender cuán grande, poderoso, sanador, omnisciente, omnipresente, misericordioso, amoroso y proveedor es nuestro Dios. Descubra que puede hablar con Él directamente y que Él utiliza su palabra para contestarle y este es sólo un privilegio  de todo aquel que lo busca en Espíritu y en verdad. Descubra, como Job, quien dijo "de oidas lo habia oído, pero hoy mis ojos lo ven."

Declaración  
Oye, oh Jehová, mi voz con que a ti clamo; ten misericordia de mí, y respóndeme. Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro. Tu rostro buscaré, oh Jehová;  no escondas tu rostro de mí. No apartes con ira a tu siervo; Mi ayuda has sido. No me dejes ni me desampares, Dios de mi salvación

No hay comentarios:

Publicar un comentario