Romanos 10:9.......Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
El término salvación equivale a rescate e implica liberar a una persona de la esclavitud del diablo, y del pecado. Es el proceso por el cual el hombre es liberado de la esclavitud mediante la obra expiatoria de Jesús en la cruz y contempla varios conceptos: justificación, regeneración, santificación, sanidad del cuerpo, y paz.
El Señor nos dice que es por fe y se nota en los resultados. Ejemplo, alguien era alcohólico, escuchó de Jesús, clamó a Él, y éste le libertó, la sociedad vio el cambio. Otro estaba poseído por demonios; Jesús el Señor lo libertó y la sociedad vio el cambio. (Lucas 8:35. "salieron a ver lo que había sucedido; y vinieron a Jesús, y hallaron al hombre de quien habían salido los demonios, sentado a los pies de Jesús, vestido, y en su cabal juicio; y tuvieron miedo.
La salvación traerá como consecuencia que el hombre viva en paz y libre en esta tierra y que, en un futuro cercano, cuando el hombre muera físicamente, su ser espiritual estará eternamente con su creador, Jehová.
Dios nos enseña que la salvación se puede perder. Hebreos 10:28 dice: "El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente. ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?”
Nos enseña, además, su palabra que debemos cuidarla. Filipenses 2:12 dice: "así que, amados míos, tal como siempre habéis obedecido, no sólo en mi presencia, sino ahora mucho más en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor.
La salvación creída de esta manera es una doctrina sana (una enseñanza sana). Hebreos 13:9 dice: "No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas."
Si alguien recibe una enseñanza donde dice que la salvación no se pierde y la acepta entonces habrá caído en una doctrina errónea (enseñanza errónea).
Declaración
Creo que Jesús es mi Señor. Creo que Dios le levantó de entre los muertos resucitándole. Creo que, mediante su sangre derramada, pagó un precio por mi salvación, la cual cuidaré. Me apartaré del pecado; viviré para confesar que es Jesús es El Salvador
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